Recorrer Cerro Blanco es un privilegio para los amantes de la naturaleza, ya que es un bosque seco tropical, cubierto de hojas secas que crujen al caminar, este cerro es una reserva privada de 6.078 hectáreas, en el año 1989 se declararon 2.000 hectáreas de Bosque Protector y ahora cuenta con 6.078 hectáreas.
Está ubicado en el extremo sureste de la Cordillera Chongón Colonche en el Cantón Guayas y se encuentra a 16 km de la vía Guayaquil - Salinas.
Existen 2 estaciones en este tipo de bosque: La estación seca, es cuando la hojas de los árboles se caen, en cambio cuando es tiempo de lluvia las hojas permanecen en los árboles, verdes y frondosas.
Este bosque posee una alta biodiversidad de fauna y flora.
Fauna: ardillas, perezosos, mapaches, guanta, guatusa, venados, tigrillos, pumas, monos aulladores. Insectos como la mariposa morfo y la araña migala. En las aves encontramos, gavilanes, halcones, lora de frente roja y el papagayo Guayaquileño.
Flora: Encontramos diferentes tipos de árboles que habitan en este cerro como: el árbol colorado, guachapelí, guayacán, pechiche, ceibo, bototillo, balsa, sassafras, veldacos, aromos, chiriguas, algarrobos y guasmos.
De todos estos tipos de árboles existen ciertas especies que son endémicas del cerro como: aromos, ceibo, algarrobos, guasmos, chiriguas, veldacos, bototillos y sassafras.
Y las especies amenazadas o en peligro de extinción están el papagayo guayaquileño y el gavilán dorsigris.
Se han ido talando árboles para construir ciudadelas, y esto ha hecho que el Bosque Protector Cerro Blanco, se siga disminuyendo.
Conclusión...
Es una experiencia inolvidable, porque al recorrer la montaña conocimos un sinnúmero de árboles.
El clima estuvo perfecto para poder ascender a la montaña.
Podemos decir que es una montaña muy importante para la vida de los animales que viven allí, ya que en ella encuentran su sustento.
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